Fin de los cursos


Vuelvo a casa. Todo sigue como lo había dejado aquel lejano 29 de junio, cuando marché al Euroforum Infantes de San Lorenzo de El Escorial. Comenzaba entonces una aventura que no sabía cómo iba a acabar ni de qué manera se desarrollaría. Y aquí me tenéis, un mes y medio después, de vuelta a casa.

En la maleta me he traído la ropa, algunos libros que me han regalado y bastantes papeles, pero lo que más me ha costado meter (dado su voluminosidad), han sido los buenos momentos que hemos vivido todos juntos durante estos Cursos.

En una bolsa aparte (debido a que la maleta estaba llena), me he traído a mis nuevos amigos, compañeros de trabajo y/o anclajes en la barra de un bar (perdón, antro) hasta las primeras horas de la madrugada. Allí departíamos sobre cualquier tema mientras unos introducían sus gracias y otros comíamos bocadillos de jamón y queso servido el primero en un plato, el segundo en otro y el pan en un tercero.

Hasta mi casa han llegado también los abrazos, los besos y los apretones de manos de las despedidas. Unos más robustos que otros, dependiendo de la envergadura de cada cual. Los mejores deseos y la promesa de volver a vernos fueron la tónica habitual de estos momentos que, por ser los últimos, son quizás lo más duros.

Respecto a mí he de decir, declarar, confesar, que me he hecho amigo del diccionario de sinónimos del Wordreference; que he aprendido a colocar las comas, los puntos y comas (al menos lo he intentado, David); y que la experiencia que he adquirido es muy superior a todo lo aprendido en cuatro años de carrera. Me decía el otro día el rector que el periodista ha de tener más formación teórica que práctica porque “los estudiantes se obsesionan con la práctica” (lo podéis leer más abajo). Pues bien, yo creo que el trabajar en los Cursos de Verano de la manera que lo he hecho yo es la mejor escuela posible para introducirte en este mundo que, anunciado como tétrico y lleno de trepas, es solidario y repleto de compañerismo. Desde el primer día en que nos fuimos a tomar la primera caña en Donoso Cortés formamos un gran equipo sin fisuras que se ha mantenido durante este mes y medio, y que ha ido creciendo con el paso del tiempo.

Personalmente, me siento especialmente agradecido a David, por haber tenido que corregir tantas comas mal puestas o sin poner; a Picos, por darle esa vueltecita más al titular, darle ese último repasito a las informaciones justo antes de dejarme marchar; a Magariños, el maquetador, por haber resistido esas batallas de líneas perdidas y guías movidas; y, sobre todo, a la jefa, la gran jefa, Antonia Cortés, por haberme dado la oportunidad de trabajar en el Gabinete rodeado de un gente tan maravillosa y haber confiado en mí para aportar mi granito de arena a Verano Complutense.

Tampoco me quiero olvidar de mis otros compañeros de Gabinete: Elena Sancho, siempre con la sonrisa y los cánticos puestos; Elena González, con la que compartía miradas confidentes desde el otro lado del Gabinete; Julio Vallejo, el mayor experto en cine y, también, el mayor despistado de los Cursos; de Natalia Gómez, mi protectora y con la que compartía iniciales; y, como olvidarme del fotógrafo todo terreno, un hombre cargado con un equipo fotográfico capaz de disparar tres flashazos seguidos a un ponente en un momento de debilidad y dejarle K.O.: el gran Nacho Calonge, Sagitario de los buenos.

A Ángela (Punto Radio), Raquel (COPE); Bea y Lucila (Europa Press); Ana, Rita, Alicia, Javi, Iván (EFE); Cristina y Javi (FaxPress); Cristina, Pedro, Álex (Cadena SER); Carmen (Onda Cero); Cristina (Servimedia).

A todos vosotros: GRACIAS DE CORAZÓN. Juntos hemos pasado un verano inolvidable, que espero poder repetir pronto, ya mismo, porque el final de estos Cursos suponen el comienzo de otros.

Berzosa: «La universidad está perdiendo bastante de razonar, pensar y reflexionar»

Carlos Berzosa (Madrid, 1945), lleva toda una vida dedicada a la docencia y la economía. Aunque nunca pensó que llegaría a ser rector, en 2003, tras 14 años como decano de la Facultad de Económicas, fue elegido máximo dirigente de la Complutense porque había cosas importantes que cambiar. Ahora, la Universidad afronta el nuevo reto de adaptar los planes de estudio al nuevo marco europeo y, además, crear unos Cursos de Verano renovados y que atraigan el interés internacional como ocurría en los primeros años 90. Estos son los desafío del futuro.

Usted es Rector, profesor y medio político ¿Es compatible todo?
Como mejor me siento es como profesor universitario. En política he estado activo, pero no he hecho una carrera política, sino que he participado desde la base. Elegí ser rector porque no estaba muy satisfecho de cómo iban las cosas en la Complutense, y había que darle un cambio importante respecto al ultimo rectorado, que había generado una situación muy plana de la cúpula de la universidad y muy de favores y de cosas extrañas que han salido posteriormente
¿Imaginó alguna vez que llegaría a ser rector de la Complutense?
No, nunca; ni siquiera ser profesor universitario. Yo quería hacer una carrera y, en principio, no tenía ninguna definida, pero me gustaba más el cine que estudiar economía. Me metí en económicas porque, por entonces, aún no había Facultad de Ciencias de la Información y, para la de cine, había que prepararse para entrar. Además, coincidió con una época muy conflictiva estudiantil y ahí fui tomando conciencia política y cultural. La facultad me gustó, pero me gustó más por los pasillos que por las clases, que me parecían bastante defectuosas. A lo largo de mi existencia como rector, he podido corroborar que las aulas eran bastante deficientes y que la mayor parte de los profesores no estaban al corriente de las disciplinas y nos enseñaban cosas un poco absurdas.
¿Y eso ha cambiado?
En parte, porque el profesorado está ahora más actualizado, y la gente joven está más al día de lo que se publica en su especialidad. Lo que ocurre es que ha habido una excesiva especialización y una pérdida de la concepción global de los procesos, y, a veces, estamos tan mediatizados por el programa, por acabar los temas, por examinar, que no enseñamos a los estudiantes a razonar. Nos interesa que se aprendan las cosas como sea y las aprueben. La universidad está perdiendo bastante de lo que debe ser: razonar, pensar, reflexionar.
¿Qué se puede hacer desde el rectorado?
El rector puede hacer poco, porque en la Universidad hay muchos escalones de poder académico, y la responsabilidad de docencia e investigación está en mano de los departamentos. Lo único que podemos hacer es sancionar al profesor que no cumpla, que haya cometido alguna injusticia o que no haga caso a las tutorías, pero no se puede incidir en los contenidos a no ser que haya denuncia por parte de los alumnos sobre un temario obsoleto.
¿Cuál sería su universidad ideal?
Sería una donde hubiera grupos de alumnos no muy numerosos; donde se pudiera impartir una docencia en la que hubiese participación por parte del estudiante, tanto en exposiciones en clase como en la resolución de problemas; que se conociera mucho más al alumno y se le pudiera evaluar de una manera más objetiva. Una Universidad donde se combinara un buen conocimiento teórico con otro práctico, pero un conocimiento teórico profundo, porque pienso que los estudiantes se obsesionan con la práctica.
¿Las prácticas son deficitarias en la complutense?
Yo creo que sí, porque ha habido muchos alumnos y una escasez de medios. Además, muchas veces no se han hecho los esfuerzos necesarios para llevar a cabo prácticas. Donde más fallan las prácticas es en las facultades donde ha habido mucha masificación, como en Derecho, Económicas o Ciencias de la Información
¿Va a haber cambios en los cursos de verano para darle un enfoque más internacional como en los años 89, donde venía gente como Ratzinger o Vargas Llosa?
Esta fue una época dorada de dinero. En aquellos cursos, aunque había mucho ocultismo sobre su presupuesto, y se llegó a hablar de 1300 millones de pesetas. Luego se han ido reduciendo hasta el punto que ahora tenemos un presupuesto menor. Estamos haciendo cosas con poco dinero, pero vamos a darle un giro para que esto tenga una proyección internacional más importante y recuperar todo lo que fueron estos cursos donde participaban políticos, intelectuales, académicos y literatos de los más importantes. Espero que el dinero nos lo permita.
¿Va a haber cambios de patrocinio?
Sí, Caja Madrid va a abandonar el patrocinio y ya estamos buscando patrocinadores
¿Cómo va la búsqueda?
Bien, saldrá adelante. Aún no puedo decir nada hasta que no cerremos y firmemos, pero creo que sí que lo conseguiremos.
¿Y tiene algo que ver con quien gobierna Caja Madrid?
Yo creo que no. Lo que sé es que quieren otro proyecto de financiación, dirigido más a la investigación, pero quieren seguir con la relaciones con la Complutense. No rompemos la relación, solo que han pensado que ya están cansados de financiar los Cursos de Verano.
¿Qué futuro le vaticina a los Cursos de Verano?
Importante, porque la orientación que le queremos dar va a ser realmente relevante. Tenemos unas ideas el director de la Fundación y yo que son bastante coincidentes, por eso le vamos a dar ese giro hacia temas muy importantes. Creo que los cambios que introduzcamos van a ser para mejor.

No se han hecho los esfuerzos necesarios para llevar
a cabo prácticas

En su programa electoral decía que quería que el nombre de la complutense se dijera con orgullo y admiración ¿lo ha conseguido?
Estamos en ello. Yo creo que a la Complutense le hemos dado una imagen exterior mucho más potente de la que tenía. No es fácil mover la Complutense, porque es muy grande, pero creo que tenemos mucha vida de investigación, docencia y también cultural. Estamos consiguiendo un nombre destacado en el Mundo.
¿El plan Bolonia favorecerá la privatización?
No, eso son habladurías. El lenguaje economicista está entrando mucho en el mundo universitario, y esto es un error. Tenemos obligación de preparar a la gente para que salga con empleo en buenas condiciones, y no podemos ser ajenos al mundo en el que vivimos.
¿Ha culminado ya su cambio tranquilo?
Aún hay que seguir. El cambio hay que hacerlo todos los días. Ahora estamos con los nuevos planes de estudios adaptados al nuevo espacio de educación superior y es un desafío considerable aun cuando tiene sus lados oscuros. Los planes se desarrollan por parte de las facultades, que son las expertas en la materia, pero yo no estoy muy contento de cómo están saliendo las cosas
¿Por qué?
Porque no quiero compartimentos estancos desde el principio y, por las informaciones que me llegan, parece que esto se está haciendo. Soy partidario de una enseñanza más general a otra más específica y que luego ya estén los másteres o la formación continua, pero no se puede obligar a la gente desde el primer momento. Vamos a hacerlo lo mejor posible, pero todos los cambios de estudios son traumáticos, porque hay muchos intereses en juego y, por desgracia, cada vez se piensa menos en los alumnos.
Hablando de economía… ¿qué balance hace de los Cursos de Verano 2008?
En general han estado bien, porque he hablado con gente que ha venido y me han manifestado su satisfacción. En este sentido, hemos hecho lo que tiene que hacer la Universidad: contribuir al conocimiento y su transmisión. Lo que pretendemos es hacer vida científica, cultural, artística y creativa. Otro elemento que también se vincula es el tema mediático: no existes si no sales en los medios, y eso nos condiciona mucho, porque los medios de comunicación solo se ocupan de asuntos muy actuales, y hay gente que puede decir muchas cosas importantes y los medios no hablan con él.

Javier Elzo cree que estamos abocados a la adulación y al mimo hacia los jóvenes

«Yo soy yo y mis circunstancias». Esta frase, acuñada por Ortega y Gasset, bien podría aplicarse a los jóvenes que se han ido formando a lo largo de la Historia. Según el catedrático de sociología, Javier Elzo, los adolescentes se forman en una sociedad cuya vorágine de cambio es imparable, y, en ese proceso, se cometen dos errores fundamentales: identificar al joven con términos negativos y agasajarlos con ternura. «Estamos avocados a la adulación y al mimo hacia los jóvenes, porque tenemos miedo a la disciplina y la educación», afirmó Elzo en su ponencia del curso A la búsqueda de la felicidad: de la infancia a la madurez, que dirige María Jesús Mardomingo.
Los casos de violencia entre jóvenes que han acontecido recientemente también fueron motivo de explicación por parte de Elzo, quien cree que parte de culpa de que se produzcan la tienen los medios de comunicación, porque «se banalizan los informativos introduciendo muchas noticias de sucesos, de modo que, al final, el telediario se convierte en una especie de El Caso televisivo», aseguró.

Juan José Tamayo

«Zapatero se ha convertido en una especie de rehén de la Iglesia actual». Con estas palabras se refería el teólogo Juan José Tamayo al cambio de rumbo que han tomado las relaciones entre el Estado y el clero. «Interpreto que esta distensión se debe a motivos electorales y de oportunidad política, porque una reforma de la Constitución o de los acuerdos con la Santa Sede supondría una pérdida de apoyo en los sectores católicos» aseguró Tamayo, que acudió al curso Iglesia y Estado: La cuestión de la laicidad, dirigido por Alfonso Pérez-Agote.

Excavando en nuestros orígenes

Martes, 5 de agosto de 2008
¿De dónde procedemos? Es la pregunta que José María Bermúdez de Castro y su equipo intentan descifrar en el yacimiento arqueológico de Atapuerca, Burgos. Con el análisis de los fósiles que encuentran durante los 45 días al año que duran las excavaciones, los investigadores van encajando las piezas del puzzle de la evolución humana. La última en colocarse fue una falange de la mano del Homo antecessor, la especie más antigua que habitaba Europa hace 1,3 millones de años y encontrada en Atapuerca. Quizás, este último ser murió víctima de las inclemencias meteorológicas porque, como dice el paleontólogo, «somos hijos de un cambio climático».

En 1871, el científico Charles Darwin publicaba su teoría sobre la evolución humana: el hombre procedía del mono. En marzo de 2008, se encontraban restos del homínido más antiguo de Europa en el yacimiento de Atapuerca, que codirige José María Bermúdez de Castro. Sin embargo, la polémica surgió cuando se encontraron, en Cuenca de Guadix (Granada), indicios que revelaban que el homínido europeo más antiguo se encontraba allí. Según Bermúdez de Castro, lo primero que se debe hacer en estas situaciones es una investigación científica y, una vez contrastados los datos, publicarlo en un medio especializado antes de darlo a conocer al resto de los medios de comunicación, como el de Granada. «En estos casos hace falta tener, además de marcas de cortes, fósiles humanos o industria lítica para tener una confirmación y estar bien contrastada por la comunidad científica», dijo Bermúdez de Castro antes del curso La antropología física del siglo XXI: una ciencia sin fronteras, dirigido por Antonio González- Martín. El codirector de Atapuerca también definió el yacimiento como «la mejor escuela posible para los nuevos arqueólogos».

Un pelo, una escama o un insecto son suficientes para averiguar al culpable de un delito

La resolución de un crimen ya no pasa únicamente por las manos del típico detective de gabardina gris, pipa de fumar y lupa en ristre. La ciencia y las nuevas tecnologías también han avanzado en el campo de la investigación de crímenes y delitos. Prueba de ello es que, ahora, «un pelo en la escena de un crimen, puede convertirse en una prueba de gran contundencia para incriminar a un sospechoso de haber cometido esa fechoría», como explicó el coronel de la Guardia Civil y Jefe de Criminalística, José Antonio García, en el curso Pericias, peritos y piratas que dirige Jose Antonio Lorente. Cualquier cosa, por pequeña que sea, es válida para realizar el peritaje en estos casos, incluso con una escama de pintura dejada en el cuerpo de un atropellado se puede averiguar el culpable del accidente; pero las nuevas técnicas van un paso más allá, porque mediante la antropología forense se pueden ver los insectos que han acudido al cadáver y estudiar su ciclo vital. «Este exhaustivo estudio nos ayuda a discernir el tiempo que el cuerpo lleva fallecido para, a partir de ahí, llegar a las conclusiones sobre el suceso», como aclaró el comisario general Jefe de la Policía Científica de la DGP, Miguel Ángel Santano, quien también explicó el funcionamiento de otros métodos usados por la policía, como el retrato robot o la identificación del hablante, aunque esta última «tiene la dificultad de formar a unos profesionales tan cualificados», indicó. Según Santano, hay cientos de personas que desaparecen, y muchos no aparecen o lo hace solo el cadáver, y estos métodos ayudan a identificarlo. Si Sherlock Holmes lo hubiera sabido antes, cuántos quebraderos de cabeza se hubiera ahorrado.

Lorente: «Considerar al ser humano como un objeto recargable me parece una aberración»

José Antonio Lorente (Serón, Almería, 1961) bien podría ser el Gulliver que se enfrenta a los diminutos liliputienses, pero, en este caso, los entrañables habitantes ficticios tendrían forma de cadena de ADN y el encuentro tendría fines de investigación. Y es que Lorente ha conseguido un prestigioso reconocimiento por parte de la comunidad científica al investigar casos como los restos de Colón, los asesinatos de mujeres en Ciudad Juárez o los desaparecidos en la Guerra Civil. Ahora, nos visita para dirigir el Curso de verano de la Complutense Pericias, peritos y piratas y desvelarnos algunos secretos de este diminuto mundo.

¿Cómo define el ADN?
Es la sustancia de la vida. Es una molécula que con un tamaño mínimo en cada célula, puede contener toda la información. Dentro del ser humano y la naturaleza es la sustancia más mágica y poderosa, porque es aquella que da la vida, la mantiene y la transmite.
Alguna vez lo ha comparado con un campo de juego…
Sí, porque tenemos unas características genéticas que hemos heredado y éstas hacen que nuestra vida se vaya a desarrollar dentro de unos márgenes biológicos. No podemos salirnos de ahí. Genéticamente, una persona puede tener la capacidad de medir entre 1,70 y 1,80m. Si tiene una alimentación perfecta, hace deporte y no tiene enfermedades, llegará al máximo, pero no podrá sobrepasarlo, porque no tiene esa característica. El campo de juego está marcado.
¿Hasta dónde se puede saber con el ADN?
El ADN marca características biológicas y genéticas. Hasta ahí se puede saber mucho: propensión a desarrollar enfermedades, capacidades intelectuales, físicas etc. Pero, por suerte - porque si no el ser humano ya vendría definido desde su nacimiento- la educación, la formación y los ejemplos que uno ve influyen mucho. El ADN nos da una información que hay que tomar con muchos matices porque luego en el desarrollo de la vida eso puede cambiar de una manera importante.
¿Cómo han evolucionado las técnicas de análisis de ADN?
Mucho, porque ahora se pueden analizar millones de unidades de ADN en pocas horas. Yo siempre pongo el ejemplo del que tiene un mapa: una persona viaja desde un lugar muy lejano hasta España, se baja en Barajas y alquila un coche con un mapa de España. Nosotros tenemos ahora el mapa del genoma humano y sabemos donde están, igual que ese señor que ve que existe una ciudad pero no sabe cómo funciona. Esa complejidad que nos encontramos en la vida real es lo que a la ciencia le está pasando con el genoma humano: tenemos muchos datos pero el funcionamiento exacto es lo que está pendiente. Además, como en el tráfico, hay circunstancias ajenas que influyen sistemáticamente: la educación, la formación, el entrenamiento…
¿Y ese conocimiento de esa ciudad debe tener algún tipo de límite ético?
Creo que sí. El científico, por naturaleza, está dominado por la curiosidad y la necesidad de profundizar más en el conocimiento y en los datos que existen. Desde la sociedad hay que tener una visión más global y tiene que poner –por puras precauciones- unos límites legales aparte de los éticos. En esta parte de la investigación genética muchas veces se está al borde del límite, y esto nos atañe a todos, porque si se investiga más o menos sobre energías renovables lo veo algo cercano, pero no tiene nada que ver con que mañana haya un tratamiento para poder curar una enfermedad.
¿Será factible la clonación humana?
Desde el punto de vista técnico es posible, igual que se han podido clonar animales de cierta complejidad. El ser humano es un animal más. Considerar al ser humano y a la vida de una persona como un objeto recargable no tendría mayor sentido y me parece una aberración total.
¿Cómo ayuda el ADN a buscar desaparecidos?
Muchísimo. En primer lugar, porque es una muestra biológica que perdura mucho tiempo; es decir, aunque hayan pasado millones de años, el ADN sigue ahí, aunque no siempre se puede estudiar. En segundo lugar, el ADN permite un abanico de comparaciones bastante grande. Todas las técnicas de criminalística son comparativas. Esa doble vertiente convierte al ADN en un elemento insustituible en la identificación de desaparecidos.
Desaparecidos actualmente o hace mucho tiempo, como en el caso de Colón…
Efectivamente. Estudiamos desaparecidos con un interés social, humano y judicial; o personas desaparecidas y cuyo rastro se perdió hace tiempo, como Colón, el Zar de Rusia u otras personas sobre las que hay dudas de dónde pueden estar sus restos o en qué condiciones. El ADN se convierte fundamental, porque ninguna otra técnica vale si no tienes con qué comparar.

Un registro nacional de ADN sería técnicamente posible, pero se tratarían esos datos como si todo el mundo hubiese hecho algo


¿Está resuelto ya el “enigma” de Colón?
Sabemos que los restos que hay en Sevilla son de Colón, pero también sabemos que no está el esqueleto completo de una persona, por lo que hay huesos que deben estar en otros sitios. El ADN nos permitió corroborar que había partes en Sevilla y otras en República Dominicana.
¿Fue complicado descifrar aquel genoma?
Fue muy complicado por el mal estado de los huesos y también porque este tipo de investigaciones se llevan a cabo entre varios laboratorios y cada uno trabaja de una manera. En un determinado momento, nos tuvimos que sentar todos juntos y poner encima de la mesa los resultados que teníamos.
Con la nueva Ley de Memoria Histórica, ¿se están haciendo más identificaciones de fosas comunes?
Esta ley hace que las investigaciones estén recayendo sobre nivel autonómico. Por ejemplo, en Andalucía se está haciendo un estudio histórico y geográfico para recopilar la información previa y localizar el lugar de manera fiable. Si nosotros no sabemos quiénes son los cadáveres, no podemos tener familiares para comparar, con lo que la investigación sería inútil. Eso supondría un desembolso económico tremendo y los beneficios serían muy pobres.
Por eso usted ha apoyado la creación de empresas privadas de investigación genética…
Sí. La empresa privada contribuye a descargar el sector público cuando el trabajo se incrementa. Estás empresas cumplen la función de apoyar al cuando haya una situación especial, porque si los laboratorios de la Policía y la Guardia Civil se ponen a analizar los huesos de la Guerra, estarían paralizados durante varios años para otro tipo de investigaciones.
¿Qué se está haciendo en los casos de Ciudad Juárez y Chile?
En Chile asesoramos la creación de un laboratorio estatal, pero, hoy en día, debido a los múltiples problemas internos, la gran parte de las muestras las han enviado fuera para hacer análisis ajenos a la presión chilena. En Ciudad Juárez sí se ha avanzado mucho y, últimamente, se creó un programa de identificación que ahora se está centrando el tema en la prevención de los delitos.
¿Sería posible un registro nacional de ADN?
Técnicamente sería posible hacer una base de datos donde todo el mundo estuviera registrado mediante sus genes, pero yo no soy partidario de ese tipo de bases masiva, porque pervierte el sistema. Ayudaría a resolver más delitos, pero a costa de tratar esos datos como si todo el mundo hubiese hecho algo, y todos somos inocentes hasta que se demuestre lo contrario.

Lunes, 29 de julio de 2008

Cuando un bombero se dirige a sofocar un incendio ha de conocer los métodos de apagarlo y, además, las leyes que rigen en ese lugar. Sin embargo, el problema viene cuando en cada sitio existen unos ordenamientos jurídicos distintos. Esto fue lo que puso de manifiesto el profesor de Derecho Administrativo de la Universidad Autónoma de Madrid, Jorge Agudo, en su ponencia del curso Incendios forestales: ¿una catástrofe estival inevitable?, dirigido por Cristina Montiel. «Los planes reguladores no son sólo a nivel regional, sino también locales y comarcales; es decir, la cadena normativa es casi infinita», afirmó Agudo. En el ámbito europeo, también destacó que, actualmente, «no existe una política común europea en la prevención y extinción de incendios», aunque los países del Mediterráneo disponen de un ordenamiento más desarrollado.

Lunes, 29 de julio de 2009

El 80% de los españoles vive en ciudades pero, en muchas de ellas, el aire que respiran sus habitantes no se encuentra en las condiciones óptimas. Para disminuir los índices de polución y mejorar la calidad del aire «hay que tener claro el diagnóstico de la situación para, después, ver las medidas posibles, como el control o la reducción de emisiones», según explicó la investigadora del Centro de Investigaciones Energéticas, Medioambientales y Tecnológicas (CIEMAT), Begoña Artiñano, en el curso La calidad del aire en España, dirigido por Montserrat Fernández

Eternamente agradecido

José Luis Sampedro recuerda, a simple vista, a un ciprés. Erguido y firme, balancea las hojas de su sabiduría allá por donde va. Sereno, desmiga los argumentos perfectamente enlazados de su conferencia extraordinaria 60 años después. La Medalla de Honor de la Universidad Complutense ya cuelga de la solapa de su chaqueta y el rector complutense, Carlos Berzosa, lo ha definido como «una mente prodigiosa y una inteligencia maravillosa». Emocionado y agradecido, Sampedro no ha podido contener la emoción antes de confesar que no puede imaginar mayor honor que el recibir este galardón.

A sus 91 años, José Luis Sampedro gasta una energía envidiable. Su memoria, implacable ante el paso del tiempo, le permite poder contar sin fisuras la historia del ser humano desde sus inicios más remotos hasta la actualidad. Es un humanista o, como a él le gusta oír: una persona que ama esta vida. Y motivos no le faltan, porque Sampedro se tuvo que aferrar a las manos salvadoras de Valentín Fuster para impedir que unas dolencias cardiacas le cortaran las alas de su amada vida. Fruto de esta amistad, surgió el libro «La ciencia y la vida», donde Sampedro da su particular visión humanista del mundo que habitamos y que, según él, «explotamos constantemente de manera irracional».

Ahora, perfectamente recuperado de aquella etapa, Sampedro asiste al curso homenaje «José Luis Sampedro: sentido literario y económico de un humanista del siglo XX» dirigido por Francisco Martín, y ya puede presumir orgulloso de poseer la Medalla de Honor que la Universidad Complutense le ha entregado por «sus relevantes méritos académicos y en reconocimiento de su aportación a los estudios de estructura económica, así como por su fecunda labor creadora en el ámbito de la literatura».

En una ceremonia emotiva y con la sala a rebosar, Sampedro desplegó todos sus recursos dialécticos para agradecer el galardón y para desarrollar su conferencia extraordinaria 60 años después, en la que trató piezas angulares de su vida, como el humanismo, la economía o el lenguaje. Según Sampedro, «la conquista de la palabra es lo que hace humano al ser humano; lo que nos permite construir un mundo cultural secundario». Para él, los tiempos que corren están dentro de un sistema de barbarie donde el sistema está agotado pero la ciencia sigue subsistiendo.

Aparte de su faceta de economista, este barcelonés ha dedicado en paralelo parte de su vida a la política y también a la escritura de libros como Los círculos del tiempo, La sonrisa etrusca, El amante lesbiano o La senda del Drago.

Los médicos hacen compatibles la consulta y los proyectos de investigación

Nuestra concepción clásica del médico se asemeja a la del profesional metido en una sala pasando consulta. Sin embargo, desde hace tres años, existe un Plan Nacional de I+D+i que ya ha permitido crear en los hospitales pequeños «nichos» de investigación compatibles con la atención de pacientes, tal y como indicó la directora del Instituto de Salud Carlos III (ISCIII), Flora de Pablo, en la inauguración del encuentro Medicina traslacional: programa de intensificación de la investigación del ISCIII, dirigido por Joaquín Arenas. A su juicio, uno de los problemas del Sistema Nacional de Salud es la falta de proyectos de innovación en la formación de los profesionales médicos: «En la etapa de MIR, debería reservarse un tiempo para la investigación, aunque las comisiones de especialidades crean que todo el tiempo es imprescindible para la formación», denunció De Pablo. La solución quizás pase por incluir la investigación en los hospitales universitarios, aunque ahora, con el nuevo Ministerio de Ciencia e Innovación, la directora del ISCIII espera que la sinergia de fuerzas creada otorgue una nueva oportunidad para estos avances.

Castilla del Pino: «La mirada fija es una mirada que muy poca gente es capaz de consentir»

La mirada es el espejo del alma, el instrumento que usamos para percibir el mundo que nos rodea, pero, ¿qué es exactamente? Carlos Castilla del Pino, psiquiatra y miembro de la Real Academia Española (RAE), la definió en el curso La mirada, las miradas, dirigido por Sofía Gandarias y Sebastiano Grasso, como la parte fundamental del rostro, los globos oculares, los párpados, las cejas y la frente, constituyendo todo el centro del rostro. Además, a diferencia de lo que piensa mucha gente, el ver y el mirar no es lo mismo: «Son dos procesos distintos, porque usted no sería castigado si ve a una mujer desnuda, pero sí lo sería si se parase a mirar», explicó Castilla del Pino en una intervención donde también destacó una anécdota de Ortega y Gasset: «Tropezaron dos muchachas con Ortega y un amigo mientras subían una calle y aquél le dijo: a nuestra edad, no es que no nos miren, es que ni nos ven». En el curso también se dará una visión de las miradas en la literatura, el periodismo o el arte de Dalí. Según su codirectora, Sofía Gandarias, «lo fundamental es la mirada sobre el otro y aprender a escuchar, porque así se sabe mirar mejor»

Camps: "¿Para qué tener unos medios públicos si hacen casi lo mismo que los privados?"

Lunes, 21 de julio del 2008


Como Clara Campoamor en su época, Victoria Camps (Barcelona, 1941) es uno de los principales baluartes en la denuncia de la exclusión de la mujer en la vida política. Profesora y catedrática de Ética en la Universidad Autónoma de Barcelona, también fue senadora socialista por Cataluña entre 1993 y 1996 y presidió la Comisión de estudio de contenidos televisivos en el Senado. Camps acudió a la clausura del curso Voces de la ironía, dirigido por Javier Muguerza y Yolanda Ruano.

¿Por qué considera que lo público está relacionado con lo privado?
Porque el espacio público suele entenderse como el espacio en el que actúan los políticos. Ya no es así, pero hay tanta complicidad entre los medios y la vida política que difícilmente el espacio público es el lugar donde se expresa la sociedad civil, porque parece que hay que pasar por la política para estar ahí.
En los medios públicos, ¿Se tratan asuntos sin interés?
No, yo creo que el defecto que tienen los medios públicos es que compiten demasiado con los privados y, por tanto, su función siempre está en cuestión, es decir ¿Para que tener unos medios públicos si prácticamente hacen lo mismo que los privados?
¿Cree que el sistema de los consejos audiovisuales puede implantarse en toda España?
Debería, porque ahora solo hay Consejo en Cataluña, Navarra y Andalucía y eso crea un agravio comparativo, porque las televisiones de estas comunidades están más controladas que el resto del país Los medios deben ir hacia una voluntad de autorregulación y necesitan un consejo que les ayude a establecer criterios e interpretar la legislación.
¿Qué se puede hacer para acabar con la banalización de la programación televisiva?
Lo veo muy difícil mientras que la programación tenga que ser tan competitiva, porque se corren pocos riesgos, se hace aquello que trae más audiencia inmediata y se banaliza todo. Por eso hay que defender unos medios públicos que no dependan tanto de la publicidad y, por tanto, no tengan que competir y que hagan lo que piensen que una televisión pública debería hacer.
¿Qué le parece la idea de quitar la publicidad en la televisión pública?
Creo que hay competencia desleal, pero mantener una televisión pública con dinero sólo público es muy caro. Yo siempre he sido partidaria del canon; es decir, del impuesto directo para pagar la televisión, pero aquí no lo tenemos y ya es difícil implantarlo. La televisión pública debería disminuir mucho su carga publicitaria y tener bastante menos.
¿Cuál es su diagnóstico de los medios de comunicación actualmente?
Se ha hecho un esfuerzo por mejorar y diferenciar un poco lo público de lo privado, pero, por otro lado, tenemos demasiados medios de comunicación tanto públicos como privados y yo creo que eso es excesivo. Ahora con Internet existe otra guía de entretenimiento que puede hacer que la televisión tenga que restringir un poco más y competir de otra manera.
¿Contribuyen los medios a la participación ciudadana?
Creo que no, al menos los más tradicionales, como la televisión. Los nuevos sí que pueden aumentar la participación; es decir, lo que se ha llamado la blogosfera, donde todo el mundo grita y nadie escucha ni entiende nada. Quizá sea una participación que no nos convenga mucho.
¿Cómo se puede comprometer un ciudadano para mejorarlos?
Puede hacer algunas cosas, sobre todo debería quejarse más, porque en el Consejo casi no hemos recibido quejas. La presión que puede hacer una ciudadanía organizada a veces funciona, pero no se puede hacer mucho más.
¿Falta ética en los medios de comunicación?
Ética falta en todas partes y ha faltado siempre. También falta responsabilidad, porque es muy difícil limitar la libertad de expresión y, por eso, es importante que los profesionales sean conscientes de que su influencia sirve para socializar y deberían limitar algunas cosas.
Desde la primera mujer periodista –Carmen de Burgos- hasta la actual como, por ejemplo, Rosa Villacastín ¿Cómo ha evolucionado la mujer en España?
Ha sido positiva, porque ahora está mucho más presente, aunque debe estarlo más, sobre todo en el periodismo, donde la mujer está muy presente en los niveles más bajos pero todavía no ha llegado a los altos puestos directivos. La evolución aún no ha tocado techo. La paridad debería producirse de forma espontánea y no se produce.
¿Es usted feminista?
Sí. La mayoría de las mujeres y gran parte de los hombres – aunque sea por vergüenza - tienen que decir que son feministas en el sentido de defender los derechos de la mujer y su presencia en todas. Esto lo tenemos que defender todos.
¿Qué papel juegan las mujeres en el periodismo actual?
En ámbitos como la política ha habido pasos importantes que han dado más presencia a la mujer. El Consejo Audiovisual hizo hace poco un estudio sobre la mujer que manda en Televisión y Radio y no llegaba al 20%
¿Cuáles son los obstáculos para una igualdad eficiente?
El mayor obstáculo es el de conciliar la vida laboral con la familiar, por dos razones: porque el tipo de organización laboral y no laboral que tenemos ha sido pensado por hombres; y otra porque el reparto del trabajo doméstico aún no se ha conseguido. Estas dos razones hacen que la mujer todavía tenga una carga doble que la disuade de hacer muchas cosas.
¿La ley de igualdad es eficiente?
Habrá que verlo. Hay muchas cosas que no se resuelven con leyes. Pueden hacer ver cosas que hay que cambiar, pero, finalmente, estas cosas dependen de la voluntad de las personas más que de las leyes, porque éstas se pueden convertir en una serie de prescripciones muy ideadas que luego no se desarrollan.
¿Cree que el lenguaje español es discriminatorio para la mujer?
Todo el lenguaje es y no sexista. Yo entiendo que la palabra hombre incluye a las mujeres, al igual que ocurre con ciudadanos. No se puede decir que es sexista porque el masculino es el que se usa para englobar a los dos género. Sin embargo, eso ha contribuido a dar más visibilidad al otro género y hubo que defender los derechos de las mujeres para incluirlas.
¿Cómo influye la filosofía hoy en día?
Depende de las personas. La filosofía te enseña a pensar y a analizar conceptos. Ese hábito que se adquiere cuando se ha trabajado mucho la filosofía ayuda a tomarse la vida con filosofía. En la vida pública sí que podría ayudar en introducir más ese ingrediente de reflexión que, actualmente, no existe.

Las matemáticas se ponen al servicio de la investigación de crímenes y terrorismo

Miércoles 16 de julio de 2008

Odiadas por unos y queridas por otros, las matemáticas salen de su ámbito académico habitual para enfrentarse a otros tipos de problemas: investigar y resolver crímenes. Una de las especialidades de esta nueva metodología es la indagación en los delitos relacionados con la corrupción financiera, como el blanqueo de capitales o el narcotráfico. En el curso Matemáticas para la seguridad contra la criminalidad, dirigido por Miguel Ángel Herrero y Jorge Zurita se analiza la aplicación de esta ciencia en dichos casos. Para el sociólogo Armando Fernández «antes de usar las matemáticas hay que hacer un análisis cualitativo previo, porque el dinero ilegal se solapa con el legal». También coincide con esta posición Gonzalo Gómez, del Instituto de Estudios Fiscales: «Usamos modelos matemáticos para acabar con el blanqueo de capital, porque es lo más eficaz contra el crimen organizado», dijo antes de su ponencia. Y es que, si la gente engaña, los números no.

Internet eliminará las colas para tramitar el DNI

Los impresos utilizados para rellenar cuestionarios tienen los días contados. La revolución online está llegando a la administración y en la actualidad ya se gestionan virtualmente trámites como los del DNI electrónico. El encuentro La administración electrónica: una oportunidad de transformación, dirigido por Juan Miguel Márquez trata de indagar en los procedimientos para avanzar en esta transformación. «La administración será electrónica o no será» indicó durante su ponencia la secretaria de Estado para la Administración Pública, Mercedes Elvira del Palacio, y añadió: «hay que perseverar en el trabajo y continuar con el desarrollo de la ley para seguir estando entre los más importantes de Europa»

Julio Mayol: «No se puede ser investigador y cirujano porque te conviertes en Superman»

La tecnología avanza al ritmo que lo hace la sociedad, pero en ocasiones la velocidad que alcanza escapa a cualquier plan. El curso La próxima revolución de la cirugía: robótica, materiales y energía intentó explicar la implantación de las nuevas tecnologías a la hora de operar ciertas patologías. Ernesto Santos y Julio Mayol son dos de los grandes expertos de la cirugía robótica en España. Desde el Hospital Clínico San Carlos tratan de implantar una tecnología que, aun estando en fase embrionaria, ha salvado vidas de una forma más precisa: sin dolor, sin sangre y sin heridas.

¿Qué supone esta nueva tecnología para el campo de la cirugía?
Julio Mayol:
La cirugía robótica está en fase de investigación. Es una plataforma que sirve para desarrollar el futuro. Queremos que sea menos invasiva, más eficaz y, sobre todo, más segura. Con la plataforma Da Vinci podemos hacer abordajes laparoscópicos con mayor precisión y más ventajas para el cirujano, pero no podemos conseguir grandes beneficios para el paciente. Para eso quedan unos años.

¿Es posible su implantación masiva en quirófanos?

Ernesto Santos: Sí que es cierto que se tratan de desarrollar centros centinelas o de excelencia. Hasta que no se valide esta tecnología no se puede generalizar. Luego sí que podría llegar a más sitios.J.M.: Sobre todo no es posible porque es muy cara. Cada sistema cuesta entre uno y dos millones de euros. Además, requiere un entrenamiento especial. No podemos generalizar esa tecnología si no sabemos que se puede usar de una manera eficaz y que se consiguen beneficios. Por eso hay que elegir centros que puedan concentrar tanto la tecnología como los profesionales que tengan el conocimiento suficiente para sacar el mayor rendimiento. Probablemente no todo el sistema de seguridad social pueda hacer cirugía con el Da Vinci. Habrá que concentrarlo en los mejores centros.

¿Qué desventajas tiene?
J.M.:
Desde el punto de vista económico, el coste es enorme y el beneficio pequeño. Sin embargo, si hay centros que utilizan esta tecnología para desarrollar otras cosas el beneficio es enorme, pero no todo el mundo puede gastarse ese dinero en tener el Da Vinci y crear programas de investigación. La única manera es concentrar profesionales y tecnología y una vez ahí transferir las ventajas al resto de la sociedad.

¿En qué casos se usa este tipo de cirugía?
J.M.
: Con el Da Vinci se está utilizando para urología a la hora de quitar la próstata por cáncer facilitando mucho el procedimiento y dando muchas ventajas al paciente; también para hacer operaciones del aparato digestivo, reparar hernias, quitar la vesícula y para ginecología a la hora de quitar el útero en casos de tumores.

El funcionamiento es igual que el de un misil pero dentro del organismo

Uno de los problemas es el retardo de la imagen ¿Cómo se puede solucionar?
J.M.:
Es cierto que hay un retraso que en la mayoría de las veces es imperceptible. En las distancias pequeñas no hay casi retardo. El problema es cuando quieres hacer una cirugía aquí y tienes al paciente en EEUU. En este caso la transmisión de toda la información sí que causa problema y dificulta la telecirugía.

¿Han encontrado algún tipo de rechazo por parte del paciente?
J.M.:
Justo al revés. Les gusta la sensación. Realmente el robot no les opera aunque ellos creen que sí. Se sienten atraídos por esa innovación tecnológica y ser protagonistas de una operación en la que un ordenador o un robot toma el control de lo que hace el cirujano. Los pacientes se sienten más satisfechos y eso influye mucho en el resultado del proceso

¿Habéis encontrado problema ético?
J.M.:
Siempre se les da un consentimiento informado diciendo que lo que se va a hacer forma parte de un proyecto de investigación, que se va a tener unos cuidados especiales con ellos y que incluso se les va a seguir más estrechamente que al resto de los pacientes. No suelen rechazarlo pero algunos sí se muestran reacios

¿Podrán sustituir los robots a los humanos algún día?
E.S.
: Se están haciendo desarrollos de robots dentro de radiología y especialmente en un ámbito de punciones y ablaciones de tumores mediante agujas de radiofrecuencia. Ahora lo hacemos de forma manual mediante unas imágenes con coordenadas y desde ahí lo que hacemos es actuar manualmente. El objetivo final es que lo haga un robot porque sabemos que una imagen son coordenadas y eso lo podemos pasar a una consola de trabajo y que sea el robot el que pinche con una precisión que será superior a la humana porque va a corregir el ángulo en tiempo real.J.M.: Es difícil sustituir al ser humano. El funcionamiento es igual que el de un misil: desde un satélite le dices que quieres bombardear la Cibeles y puedes lanzar un misil desde Rusia e impactar en la fuente. Esto es lo mismo pero dentro del organismo. El radiólogo diseña un mapa con fotos y dándole la orden al robot éste va hacia el punto marcado y da igual que corras porque él sabe dónde estás.


¿A cuánto estamos de la inteligencia artificial para que un robot sea autónomo?

J.M.:
La inteligencia artificial ya se produce. Estamos creando sistemas capaces de modificar su comportamiento, pero desde que eso se genera hasta que se puede utilizar en la clínica pueden pasar muchos años y no todo lo que produces termina siendo. La innovación, y más en un país como el nuestro, lleva mucho tiempo porque no existe una cultura de innovar.

¿Hay fondos suficientes para su desarrollo?
J.M.:
Los fondos son limitados y además gran parte de nuestra universidad produce mucho conocimiento base pero invierte poco en la innovación; a transformar el conocimiento en una herramienta que se pueda patentar y luego se pueda llevar a la realidad.E.S.: Ahora hemos tenido muchas dificultades para contactar con bioingenieros o aplicaciones en biomedicina y las carreras de este tipo se van reduciendo. Va a ser muy difícil mientras no nos acerquemos más a la gente que produce esa investigación básica.


¿Qué se puede hacer para evitar la fuga de profesionales al extranjero?
J.M.:
El problema es que la presión fundamental dentro del sistema es tratar pacientes. Para pensar y producir investigación hay que tener tiempo. Nosotros tenemos el problema, pero no tenemos tiempo para pensar en él. No hay una vinculación estrecha entre el éxito y la carrera académica. Lo que no se puede es ser un excelente investigador a la vez que un excelente cirujano porque eso te convierte en Superman. Tampoco hay estímulo porque si tienes un salario fijo y trabajas más lo que haces es perder dinero: es una ecuación. El sistema nacional de salud emplea muchos profesionales preparados para ser los más inteligentes pero no se aprovecha su inteligencia. Los que tienen interés se van fuera y los que se quedan aquí se convierten en puramente funcionariales que quieren trabajar de 8 a 15h con el menor quebradero de cabeza.


El proyecto marca país busca reforzar la imagen de España para auparla a la cabeza del pelotón

Miércoles, 9 de julio de 2008

Si viajas por el extranjero y dices ser de España, la mayoría de las respuestas versarán sobre toros, sevillanas o, en el mejor de los casos, del Quijote, lo que demuestra que nuestro país no es desconocido del todo, pero sí conocido por tópicos. Por ello, el encuentro La marca país como elemento clave para la internacionalización empresarial, dirigido por Montserrat Casado, busca cómo mejorar y reforzar la marca España. ¿Es fuerte o es débil? Ángel Manuel Acebes, presidente del Instituto Español de Comercio Exterior (ICEX) no lo duda: «La imagen de España en los últimos 25 años ha mejorado mucho, pero todavía no se nos conoce demasiado por lo que somos. España es la octava economía mundial; el décimo país inversor en el mundo y todavía en algunas zonas del globo no se nos reconoce lo suficiente», dijo antes de acudir al encuentro.
Para el presidente de Positioning System y ponente, Raúl Toralba, la solución pasa por «formar un equipo bien entrenado y listo para trabajar juntos, con una buena dirección al frente». En él habría que incluir a personas como Nadal, Samaranch o Solana, quienes aportan valor añadido a la marca España del mismo modo que los eventos tipo Expo u Olimpiadas. Según Toralba, «actualmente España no es el número uno, pero hay que seguir trabajando para tener una presencia más importante y que nuestras ideas influyan más». De esta manera se mejoraría nuestra imagen cultural, económica y comercial para salir de la cola del pelotón de cabeza y poder decir eso de Spain is different.

La cirugía robótica permite avanzar hacia la operación a distancia y sin heridas

Miércoles, 9 de julio de 2008

El futuro está en nuestras manos…o en la de los robots, sobre todo en el campo de la cirugía, donde se avanza lentamente pero sin pausa en el desarrollo de una nueva tecnología basada en el trabajo con los androides. Con ellos es posible operar a una persona desde cualquier punto remoto independientemente de la distancia a laque esté y hacerlo «con precisión quirúrgica, invasión mínima del cuerpo humano y una disminución en el tiempo de recuperación del paciente» según explicó el catedrático de Cirugía de la Universidad de Chicago Jeffrey B. Mattews durante su intervención en el curso La próxima revolución de la cirugía: imagen, robótica, materiales y energía dirigido por Ernesto Santos. Además, otra revolución como Internet ha posibilitado la conexión entre quirófanos para su comunicación en tiempo real durante las intervenciones en quirófano. Una vez más, la tecnología se pone a disposición del ser humano para mejorar su vida. Sin embargo, detrás de cada robot hay un ser humano. No todo iba a ser artificial, de momento.

De Burgos: «La mujer es la transmisora de conocimientos de unas generaciones a otras»

Martes, 8 de julio de 2008

La vida a veces nos coloca en lugares donde no habíamos pensado estar nunca. Es el destino, o la casualidad. Begoña de Burgos (Málaga, 1950), arquitecta de profesión, lo sabe bien. La asamblea general de Manos Unidas de 2006, celebrada en El Escorial, la eligió como su presidenta y ahora vuelve para participar en el curso Salud materna, objetivo de desarrollo, dirigido por María José Hernando. De Burgos, una mujer serena y con las ideas claras, explica cómo afronta su ONG la nueva campaña para apoyar la consecución del quinto objetivo del milenio de la ONU: mejorar la salud materna.


¿Cuál es la meta del curso Salud materna: objetivo del milenio, que ha inaugurado?
Se trata de colaborar entre todos para la obtención de los objetivos del milenio. Hay algunos sectores en los que cunde el pesimismo, pero nosotros pensamos que esto es un flaco favor para la consecución de los objetivos del milenio, porque lo que debemos hacer es trabajar entre todos para que se cumplan. Queremos hacer llegar a los universitarios la situación de los países más desfavorecidos porque los jóvenes de hoy serán los dirigentes de mañana.

Quedan siete años para que se cumpla el plazo de los objetivos del milenio. ¿Dará tiempo a cumplirlos?
Depende de nuestra disponibilidad, de la del primer mundo. Su cumplimiento sería una consecución en la que estamos todos metidos. De aquí a 2015 lo más probable es que no dé tiempo, pero recuerdo casos como el Muro de Berlín, donde nadie pensaba que se iba a caer, y, de repente, aquello desapareció, porque lo que había detrás era una voluntad real de la sociedad.

¿Falta voluntad política para su cumplimiento?
No solo la voluntad está en lo externo como la política, la economía o las empresas, sino también en los propios individuos. Manos Unidas tenía un lema hace unos años que era «cambia tu vida para cambiar el mundo». Creemos que desde que compramos una camiseta hasta que tenemos una opinión o ejercemos un voto, todos nosotros tenemos nuestra parte de responsabilidad.

Según los datos, medio millón de mujeres mueren al año por complicaciones durante el embarazo. ¿Cuáles son las causas de esta cifra?
La primera razón es la falta de agua, porque sin agua no hay higiene. También la educación es importantísima porque un enlace que nosotros tenemos aquí como la “causa-efecto” en esos países no existe; por eso, la formación es muy importante. Nosotros sabemos que unas manos sucias traen una enfermedad, pero allí no. Por este motivo, tenemos que educar, formar, y contemplar a la persona integralmente, en todas sus facetas.

Ha hablado de educación. ¿Qué papel desempeña en la resolución de este problema?
Es básico, tanto para erradicar este problema como tantos otros. Nosotros intentamos que esta gente sea responsable de su propio desarrollo y para ello es necesario que tengan una formación que les ayude a ser capaces de tener el poder de decisión en sus manos.

¿Unas mujeres sanas son síntoma de una sociedad saludable?
Sería signo de una esperanza saludable, porque todos sabemos que la mujer es el motor de desarrollo y es la transmisora de los conocimientos de unas generaciones a otras: acompaña a sus hijos, a la familia, a la comunidad y al país; y esos países necesitan unas madres sanas que sean la esperanza de todos.

La mutilación femenina es otro de los problemas acuciantes... ¿Es otro de los retos para Manos Unidas?
Como tal, no, porque nosotros desde aquí no decidimos cuáles son los proyectos ni por dónde deben caminar. A nosotros nos dan las solicitudes de proyectos, por eso no decidimos ni hacemos campañas en ese sentido; pero, por supuesto, que lo rechazamos. Lo que decimos es que cualquier parte del cuerpo humano forma parte de su integridad y cualquier tipo de mutilación o ablación no entra en nuestros conceptos porque tanto el hombre como la mujer son valiosos íntegramente, en todo su ser.

Sin embargo, las mujeres siempre son las más desfavorecidas.
Siempre. Es la mayor víctima de las situaciones de miseria y pobreza pero también la que tiene mayor potencial y valores internos de esperanza, alegría y de compartir el deseo de futuro. Es admirable. Cuando las veo, muchas veces siento envidia por la entereza que tienen porque en los países mal llamados desarrollados la hemos perdido. Ellas se preocupan de cosas importantes mientras que aquí nos preocupamos por cosas superficiales.

Además el 90% de Manos Unidas son mujeres...
Históricamente Manos Unidas sale de una iniciativa de las mujeres de Acción Católica en el 60 y culturalmente se ha venido desarrollando así. También es verdad que cada vez hay más hombres.

¿Qué se hace desde Manos Unidas para erradicar estos problemas?
Tenemos dos tareas permanentes: una es la sensibilización de la población española informando de situaciones y llegando hasta el pueblo más recóndito. Esa sensibilización hace que recaudemos fondos para apoyar proyectos de desarrollo en esos países. Esperamos a que esas comunidades presenten solicitudes y que sean capaces de gestionarlos. Manos Unidas se adapta. Primero escucha y después actúa. Nunca lo hemos hecho de otra manera, porque pensamos que ese no es el camino. Realmente, la experiencia nos ha demostrado que esa es la mejor manera de acompañarles en ese camino tan largo como es la vida humana, que es una carrera de fondo.

¿Sería entonces como enseñarles a pescar?
Efectivamente, y luego también el complemento de «dejarles pescar». Esto es importante para nosotros porque no basta enseñarles a cómo hacerlo sino que tienen que tener la oportunidad de saberlo hacer y esto es tan importante como lo primero.

Mientras hacemos esta entrevista, el G8 se reúne en Japón ¿Qué le diría usted a estas personas que concentran tanto poder en sus manos?
Yo siempre digo tres cosas fundamentales, sea el G8 o cualquiera: por un lado, Manos Unidas hace su labor como encargo de la Iglesia católica y a muchos de nosotros nos mueve nuestro compromiso de fe y cristiandad. La segunda es que actuaran por un compromiso de justicia y equidad de valores humanos plenos y, si aún así se les ve reacios, yo siempre argumento otra tercera: ser inteligentes egoístas, es decir, deben ser conscientes de que solo tenemos un mundo y si son inteligentes mirarán a más largo plazo incluso de sus vidas y la única situación viable es tener en cuenta a los millones de personas que viven en esa situación; el futuro de todos nos va en ello.

Volando Al Filo de lo imposible

Lunes, 7 de julio de 2008


¿Te imaginas sobrevolar los Andes en un globo como éste? Aunque suponga un sueño para ti, para los profesionales de Al filo de lo imposible representa la materia prima de su trabajo. Para estos aventureros de la vida no hay ningún reto imposible. Su filosofía se basa en «resistir, buscar, encontrar y no rendirse jamás», tal y como expresa su director, Sebastián Álvaro. Durante tres días, la adrenalina de sus expediciones ha estado presente en el Taller de documentales: Al filo de imposible. Sus alumnos han podido vivir en primera persona las sensaciones de escalar en un rocódromo, ver surcar el cielo al campeón del mundo de paramotor o filmar a 70 metros del suelo.

«El hombre es la única especie que arriesga su vida voluntariamente». Estas palabras del director de Al filo de lo Imposible, Sebastián Álvaro, representan a la perfección la madera de la que están hechas las personas que componen las expediciones de uno de los programas más relevantes de la televisión yque acaba de ser galardonado con el premio de la Academia de Televisión al mejor programa documental.

En los tres días que duró el encuentro Taller de documentales: Al filo de lo imposible, dirigido por Miguel Ángel Ortiz (IORTV) y el propio Sebastián, los alumnos no solo disfrutaron con las ponencias de Javier Pons o Eduardo Martínez de Pisón, sino que, además, aprendieron a filmar en situaciones reales ante las que se enfrentan los miembros de Al filo durante sus expediciones a los lugares más inhóspitos de la Tierra, como el Annapurna o el peligroso desierto de Taklamacán.

En el primer campo base de esta aventura, los alumnos más valientes escalaron por la pared del rocódromo del Polideportivo del Zaburdón para grabar a dos grandes de la escalada como Josune Bereziartu y Rikard Otegui; imágenes que más tarde editarían y montarían para elaborar un documental sobre esta actividad deportiva.

Y así, subiendo, llegaron al segundo campo base, con parada en la demostración de vuelo del campeón del mundo de paramotor, Ramón Morillas. Tras un breve descanso, por la tarde visitaron el campamento dos expertos en la materia como Juan Oiarzabal y Edurne Pasabán, que afronta el reto de llegar a ser la primera mujer en ascender los 14 ochomiles.

El paso previo a coronar este curso estuvo marcado por el vuelo en globo con el que nos deleitó Laureano Casado y que llevó a los alumnos aventureros al final de un encuentro que no olvidarán fácilmente. Quizás, el día de mañana alguno de ellos sea el próximo Juanito porque ¿a quién no le gustaría ver el mundo bajo sus pies?